Preparar distintos alimentos en la parrilla suele ser una tarea que a muchos asusta, pues implica poner atención en detalles como son la cocción, sazón y sabor. Para las carnes rojas el proceso es hasta cierto punto más sencillo, pero esto no significa que el pescado como proteína esté peleado con la parrilla o que cocinarlo de esta manera sea una misión imposible. Es por eso que te compartimos los siguientes pasos para que te conviertas en un experto en la materia y consigas un platillo exquisito.
Selecciona el pescado ideal
Realmente todo tipo de pescado se puede asar en la parrilla, pero hay algunos más fáciles que otros. Por ejemplo, los filetes blandos suelen sobre asarse y adquirir un sabor no muy agradable; además recurrir a pescados pequeños puede traer otras complicaciones, como que se escapen por las rejas de la parrilla o que la carne se reseque.
Es por eso que te recomendamos seleccionar pescados más grandes: dorada, lubina, salmonete, sargo, besugo, rodaballo, pez limón, corvina y salmón son ideales.
Prepara el pescado antes de ponerlo en el asador
Antes de comenzar es importante que saques las vísceras del pescado y después hagas un corte de mariposa, es decir dando un corte longitudinal que divide el cuerpo en dos mitades, pero que no llegue a separarlas. Esto ayuda a que sea más fácil darle la vuelta en la parrilla y que con pocos minutos de cada lado sea suficiente para conseguir el punto ideal.
Marinar el pescado con otros ingredientes o incluso con solo limón, le dará a tu platillo un sabor sensacional. Recuerda que este marinado puede durar aproximadamente una hora en lo que la carne absorbe los condimentos.
Utiliza una canasta o besuguera para pescado
Esta herramienta siempre será una excelente opción para preparar pescados en la parrilla, ya que son una jaula que mantiene la carne en una posición adecuada y en un espacio que permite voltearla de manera completamente fácil sin que esta se pegue o se queme.
Prepara la parrilla
La parrilla debe estar limpia, esto lo puedes hacer utilizando un cepillo de alambre rígido de mango largo para que quites aquellos restos que pueden pegarse al pescado a la hora de ponerlo sobre el fuego. O, en todo caso, si no consigues el cepillo puedes emplear un pedazo de papel aluminio arrugado y con unas pinzas realizar la respectiva limpieza.
Una vez aseada tu parrilla se recomienda que engrases las barras de esta; tal paso es muy sencillo ya que lo puedes hacer con una toalla humedecida de aceite vegetal lo cual favorecerá a que la carne no se pegue.
Otro punto fundamental es que unos minutos antes de iniciar la preparación calientas bien la parrilla y que el carbón se encuentre al rojo vivo para no asar el pescado a fuego directo. En caso de que no utilices una herramienta como las canastas o besugueras y colocas el pescado directo a las barras, te darás cuenta que tu parrilla no está lo suficientemente caliente si la carne se comienza a pegar.
Mide bien los tiempos
El asador hace que la carne esté lista en muy poco tiempo. Si bien influye el grosor, el tiempo de espera no va más allá de los 11 minutos; oscilando entre 5 y 6 de cada lado. Para los cortes muy delgados puedes utilizar papel aluminio lo cual es práctico y aunque suele ser minutos más tardado ayuda a que se consiga un resultado favorable.
Ahora ya tienes las bases para preparar una parrillada de pescado asado como lo hacen los profesionales, no olvides agregar complementos a tu platillo como verduras o cereales preparados que acompañen la proteína y se logre un balance de sabor en el paladar de tus invitados.
