Acomodar una tabla de charcutería atractiva es un talento que puede desarrollarse. Rebanadas de queso acomodadas como abanico, rebanadas de jamón serrano en forma de rosa. La combinación de sabores dulces, salados y ácidos. Galletas, tostadas y rebanadas de fruta y distintos tipos de spreads para cada gusto. Todo adornado con hierbas y flores comestibles para deleitar no solo al paladar, sino también a la vista.
Ya sea que busques elevar tus habilidades para armar tu siguiente tabla de charcutería o te interese conocer más sobre esta accesible manera de ofrecer algo sofisticado a tus invitados, esta guía práctica es lo que buscas.
¿Qué es una tabla de charcutería?
La charcutería es una preparación culinaria de varios productos y presentarlos de manera que sean “agarrables” con la mano. Usualmente se incluyen carnes frías, salchichas, quesos frescos, frutas, aceitunas, pepinillos, pan y galletas, nueces y dulces, así como toppings, jaleas, mermeladas, miel, hummus, patés y otros spreads.
Por la naturaleza de la presentación y la enorme flexibilidad de qué es lo que se incluye, esta se ha convertido en la primera opción de muchas personas para ofrecer tentempiés cuando reciben visitas.
¿Cómo empezar?
Base
Lo más simple y tradicional es utilizar una superficie plana de algún tipo. Puede servirse en una tabla de madera, un platón de porcelana o vidrio. Una recomendación que hará más fácil todo el proceso es que cualquiera que sea la base, es mejor que tenga algún tipo de borde leve para evitar que los alimentos rueden fuera de ella.
El tamaño de la base depende enteramente de la cantidad de personas a la que va a servírseles. Mientras más grande, más personas comen. Aproximadamente, una base de 20 x 20 centímetros servirá hasta 4 personas, de 25 x 25 centímetros servirá para 6 personas, de 30 x 30 centímetros servirá a 8 personas, y así sucesivamente.
Además de la base, debes de considerar algunos otros recipientes pequeños para productos que no pueden sostenerse por sí mismos, como miel, jaleas o otros spread, y alimentos pequeños como rodajas pequeñas de pepperoni y pistaches.
¿Qué incluir?
Te compartimos una manera simple de decidir qué va dentro de tu propia tabla de charcutería. Los elementos principales son 5: queso, carne, frutas y vegetales, cereales, dips y dulces.
Puedes gastar cualquier cantidad que prefieras en todas las categorías, sin embargo nuestra recomendación es mantener el mismo rango de presupuesto en todas.
Quesos
El truco con la selección de quesos es la variedad de origenes (vaca, cabra, vegetal) y de texturas (sólidos, suaves, desmoronable). Es el momento de probar aquellos quesos que siempre te llaman la atención en el supermercado, ¡sé creativo! Puedes seleccionar un dip suave de queso azul o un queso camembert horneado con hierbas, solo asegúrate que tu selección complemente bien a los otros elementos de las siguientes categorías.
Carnes
El elemento original de la tabla de charcutería. Solía ser el único producto que se añadía, de ahí proviene el nombre mismo de esta presentación. Puedes seleccionar las carnes de tu tabla a partir de dos tipos de sabores: medio, de acompañamiento y potente, de acento. Para la carne de sabor medio, puede seleccionar salamis y jamones que sean deliciosos, pero no abrume otros sabores. Para la carne de sabor potente, un prosciutto salado o chorizo son ideales. Aunque no hay que encasillarse en carnes frías y encurtidas, también puedes optar por pollo rostizado, salmón ahumado o rebanadas de pavo.
Frutas y vegetales
¡La oportunidad de hacer que la presentación luzca linda! Aprovecha distintos colores y formas. Esta categoría cubre todo desde frutos secos, aceitunas, pepinillos, vegetales asados, entre otros. Los frutos rojos son opciones clásicas que combinan bien con muchas carnes y quesos. Opta por distintos sabores: dulce, fresco, salado, ácido.
Cereales
Aquí se incluye cualquier tipo de galleta o pan. Principalmente sirven para ser un vehículo para los otros elementos de la tabla, pero es esencial que también tengan buen sabor por sí mismos. Asegúrate de incluir pan básico en distintas presentaciónes, como pan pita, pan de masa madre y galletas de ajonjolí, para ofrecer algo que no sobresalga por encima de los quesos y carnes de tu elección. Sin embargo, también puedes incluir galletas con especias o sabor a ajo que sean el enfoque mismo de la combinación de sabores.
Dips y dulces
La oportunidad de añadir una capa de sabor extra en cada bocado. Las opciones sonmuchas y dependen solo de lo que te agrade más. Puede optar por mostazas especiadas, mermeladas dulces de higo, naranja o frutos rojos, hummus con chiles rostizados o miel picante. Aquí también puedes incluir otros elementos dulces como nueces confitadas, chocolate oscuro o delicias turcas y otras golosinas.